LEÓN
El obispo de la Diócesis de León, monseñor César Bosco Vivas Robelo, fue claro y directo ayer con el gobierno local y nacional, al expresar que nadie debe instrumentar como propaganda política la inclusión de la Insigne y Real Basílica Catedral de la Asunción de la Bienaventurada Virgen María, a la lista de Patrimonio Mundial de la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), en clara referencia a la contienda electoral que se avecina en noviembre.
Según el obispo, la inclusión del nombramiento del edificio religioso y cultural se convierte en este momento en un compromiso serio, no solo de la iglesia Católica, sino de todas las instituciones del Estado, la empresa privada y la población nicaragüense en general.
“Hay que dignificar la Catedral, comenzar con la limpieza de las calles y liberar el contorno del edificio de las aglomeraciones del comercio informal, proceder con el proyecto de soterramiento del cableado, que resta estética al monumento, además de impulsar la instalación del enverjado exterior, que evitará el deterioro del mismo”, dijo monseñor Vivas Robelo.
En el esfuerzo por cumplir las recomendaciones de la Unesco, el obispo de la Diócesis de León hizo un llamado a la alcaldía y la Policía para trabajar conjuntamente en programas de mantenimiento y conservación del imponente edificio.
Durante la conferencia de prensa de ayer en el obispado de León, el prelado fue enfático al expresar que ningún gobierno debe instrumentar a través de la política, la inclusión de la Catedral ante la Unesco.
“La catedral es la muestra de lo que se puede conseguir cuando se trabaja en conjunto. Debe ser una especie de método para el futuro, que no sea el gobierno que llegue, el que vaya a usar la Catedral para propaganda, sino más bien el que está al servicio de la nación, el signo más visible y bello expuesto ante el mundo, pues tendrán que poner su buena voluntad para apoyar este mantenimiento”, señaló Vivas Robelo.
La otra cara de Nicaragua
Monseñor César Bosco Vivas Robelo, señaló que la Catedral forma parte de un signo, de tantas cosas buenas y hermosas que tiene Nicaragua y que ofrece al mundo.
“La gente no solamente hablará de nosotros por los enfrentamientos y distanciamientos por motivos ideológicos, políticos o por desgracias naturales. Van a admirar la laboriosidad del ingenio de los nicaragüenses, la riqueza cultural y espiritual que tiene este pueblo manifestado en la Catedral de León, símbolo del amor y de la fe, una muestra de la unión de un pueblo que quiere honrar la tierra de donde nació”, afirmó
Actividades de celebración
Pero las festividades en honor a la nominación del imponente edificio, ubicado a 92 kilómetros al Occidente del país, que según la historia fue la primera sede episcopal de Nicaragua desde 1531, contempla distintas actividades que se desarrollarán del 24 al 31 de julio.
En el año 2000 la Unesco también declaró como Patrimonio Cultural de la Humanidad las Ruinas de León Viejo, cinco años después declaró como Patrimonio Oral e Inmaterial de la Humanidad la obra El Güegüense.
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