El juez Tercero Local Penal de Managua, Ernesto Rodríguez, rectificó la multa impuesta al concejal conservador Luciano García, quien en vez de 800 mil córdobas por las faltas de injurias y calumnias, pagará 431 mil 906 córdobas con 66 centavos.
“Errar es de humanos y el error se rectifica”, dijo el judicial, al reconocer que al elaborar la sentencia cometió un “error material”, pero que al revisar los documentos observó que, efectivamente, había ocurrido una equivocación en el cálculo.
El juez había ordenado a García pagar la suma de 800 mil córdobas; 400 mil por cada delito.
Tomó más salario, pero rebaja multa (?)
Ahora el juez recalculó la sanción tomando como base el salario total del concejal, que es de 64 mil 786 córdobas al mes, sin las deducciones para manutención de su familia. De esta suma se extrae el tercio que devenga y se multiplica por la cantidad de días multas, que en este caso son 300.
La sentencia, entonces, le quedó así: 215 mil 953 córdobas con 33 centavos por injurias, y la misma cantidad por calumnias.
Luego de leer la nueva conversión, Rodríguez señaló que “ya he explicado ampliamente que la ley me faculta para hacer esa rectificación”.
Rodríguez: No fue un juicio político
El judicial aseguró que el caso del concejal García en ningún momento respondió a intereses políticos, y que se le dio el mismo tratamiento de otros procesados.
“Este proceso ha sido público y se ha llevado como uno más. Talvez se le ha dado el despliegue publicitario porque estamos hablando de dos personas reconocidas en la sociedad, en la vida política, pero insisto: fue un caso más de los del despacho”, expresó Rodríguez.
Por su parte, el concejal García, en declaraciones a Canal 63, y ya conociendo de la nueva resolución del juez, se preguntó: “¿Cómo es posible que una persona (que es) juez no sepa restar, sumar, dividir y multiplicar? Así como cuenta el juez, cuentan en ALMA”.
Rápido ascenso
El juez, cuyo fallo de hace dos días lo sacó del anonimato, ingresó al Poder Judicial hace 11 años por gestiones de una magistrada, quien le consiguió en 1998 un contrato de un mes para que levantara un inventario en el Juzgado Local Penal de Managua.
Después de concluida esa “chamba”, el judicial de origen matagalpino recibió otro contrato por 60 días como analista de las fianzas pecuniarias que eran aplicadas en la época del Código de Instrucción Criminal.
Oficial notificador
Luego, con el respaldo de los magistrados Solís, Centeno, Alba Luz Ramos --actual presidenta de la Corte-- y Marvin Aguilar, en 1999, fue nombrado oficial notificador en Managua, y su trabajo consistía en andar en una motocicleta entregando las citas y cédulas judiciales emitidas por los jueces.
Cuatro años más tarde fue ascendido a juez Penal de Audiencia en su natal Matagalpa, donde luego de un año fue nombrado juez Local en Managua.
En 2010 obtuvo el primer lugar entre los jueces locales a nivel nacional, y fue quien emitió la mayor cantidad de resoluciones, con 636, refiere con orgullo el juez, que en las últimas 48 horas ha cobrado fama.
Mientras el juez Rodríguez solo ha necesitado 11 años desde que ingresó al Poder Judicial para haber estado al frente de dos judicaturas, su colega Julia Mayorga lleva más de 15 años en el mismo cargo de juez Primero Local.
Teller recibe notificaciones
Por su parte, el concejal liberal Leonel Teller, quien tiene “congelados” sus cuatro juicios políticos por recusar al juez Octavo Local Penal, Celso Urbina, la tarde de ayer fue notificado por el otro juez que lleva las causas que interpusieron Loyda García y Rolando Reyes, funcionarios de alto nivel de ALMA.
El juez Séptimo Local Penal, Henry Morales, notificó al concejal que para los juicios interpuestos por los funcionarios antes mencionados, le fue sancionado su abogado, Iván de Jesús Pereira, tal como hizo Urbina en el primer juicio, porque no se presentó a las audiencias especiales establecidas para la mañana de ayer.
Asimismo, le refirió que le había puesto dos abogados de oficio identificados como Elisa Beatriz López y Eddy Antonio Gutiérrez, para que lo “defiendan”.
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