CARACAS/WASHINGTON/AFP/EFE
Un Parlamento compuesto por las principales fuerzas políticas asumirá sus funciones mañana en Venezuela en un clima de tensión por los poderes excepcionales para legislar concedidos al presidente Hugo Chávez y a las leyes aprobadas con urgencia por los diputados salientes.
De los 165 diputados de la nueva Asamblea Nacional, 98 pertenecen al Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), presidido por Chávez, y 67 a fuerzas opositoras. Esta situación, emanada de las legislativas del pasado septiembre, transforma el panorama vivido desde 2005, cuando el chavismo era prácticamente la única fuerza presente en la Cámara debido a que sus detractores no participaron en los anteriores comicios.
“La oposición venezolana tendrá las puertas abiertas de la Asamblea Nacional para discutir ideas”, declaró el diputado Fernando Soto Rojas, candidato del PSUV para presidir el nuevo Parlamento.
Sin embargo, los diputados de oposición temen que la ley aprobada en diciembre que concede a Chávez poderes excepcionales para legislar por decreto durante 18 meses sobre un amplio abanico de materias les prive de buena parte de sus atribuciones.
En una columna publicada en la prensa el domingo, el presidente Chávez reconoció que el Parlamento será “uno de los grandes escenarios de la batalla de 2011”, a un año de las presidenciales en las que aspira a lograr un tercer mandato.
Para el profesor de Estudios Políticos de la Universidad Central de Venezuela, Ricardo Sucre, hay un “control progresivo del poder que va en dirección opuesta a la voluntad popular”.
Para el diputado opositor Julio Borges, la misión a partir de mañana será “develar las mentiras” del Ejecutivo y pedir “explicaciones” sobre algunas decisiones adoptadas recientemente.
Desde principios de diciembre, la Asamblea Nacional saliente aprobó más de 20 leyes nuevas o reformas de leyes ya existentes entre las que destacan la ley de educación que promueve la “construcción del modelo socialista” en las universidades, y la reforma de la ley de Telecomunicaciones, la de responsabilidad social en radio, televisión y medios electrónicos.
“Mientras el presidente sigue de espaldas a los venezolanos, nosotros seguiremos motivando, organizando y movilizando a los venezolanos para lograr el cambio que merecemos todos”, garantizó Borges.
Paralelamente, los diputados oficialistas tendrán como fin avanzar en la concreción de ideas predicadas por Chávez como el “parlamentarismo de calle” o el pueblo legislador
No hay comentarios:
Publicar un comentario