SOMOTOUnos 2,340 quintales de granos de frijol rojo, que iban a bordo de nueve camiones, permanecen retenidos desde la madrugada del pasado domingo en el estacionamiento de la sede de la Policía de Madriz, ubicada en Somoto.
La Policía presume que el cargamento iba “de contrabando” para ser vendido en Honduras y El Salvador, en momentos en que Nicaragua enfrenta escasez de este producto, razón por la cual ha subido su precio.
El operativo lo realizaron agentes policiales sobre un tramo de la Carretera Panamericana que cruza el poblado del municipio de Totogalpa, al noroeste de Madriz.
Además de retener el cargamento de frijoles también se ocuparon los nueve camiones y se detuvo a 19 personas, entre ellas choferes, ayudantes y algunos dueños de estos vehículos, quienes hasta ayer permanecían detenidos en las celdas preventivas de la Policía de Somoto.
CAMIONES LLEVABAN 260 QUNTALES CADA UNO
El subcomisionado José Martín Cáceres Muñoz, segundo jefe de Auxilio Judicial, detalló que en las primeras horas de ese día (domingo) un retén policial de carretera detuvo a los nueve camiones y, al requisar los pesados automotores, encontraron en su interior que cada uno llevaba unos 260 quintales de frijoles rojos.
“Estos camiones venían procedentes de la ciudad de Estelí e iban rumbo al municipio de Jalapa, en Nueva Segovia, pero nosotros presumimos que el producto lo llevaban con destino a Honduras o El Salvador, donde se está comercializando a mejor precio”, aseveró ayer el subcomisionado Cáceres Muñoz.
El segundo jefe de Auxilio Judicial de Madriz manifestó que el problema es que las personas que transportaban los 2,340 sacos de frijoles rojos, en los nueve camiones, no portaban la documentación del producto.
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