El funcionario alemán no opinó explícitamente sobre las condiciones en las que el tribunal electoral nicaragüense permanece, integrado por diez ex funcionarios a quienes sus cargos como siete magistrados propietarios y tres suplentes se les vencieron entre febrero y junio del año pasado, ni acerca de que estos sean los mismos señalados de cometer el fraude a favor del gobernante Frente Sandinista en las elecciones municipales de noviembre del 2008.
Sin embargo, señaló que “si las elecciones se realizan bajo la supervisión de un Consejo dependiente, podemos hablar de una hipoteca (o garantía) democrática inaceptable que a largo plazo pone en peligro las relaciones de Nicaragua con la comunidad de países democráticos”.
Klein opinó que hay diferentes formas de garantizar que un proceso sea limpio y transparente. Además de la observación electoral internacional, él mencionó “la independencia y composición del tribunal electoral, la manera en como se establecen y actualizan los registros (o padrones) electorales y todos esos detalles (que) influyen mucho sobre los procesos electorales y son tareas que hay que revisar”
No hay comentarios:
Publicar un comentario