El presidente tunecino abandona el país y el primer ministro asume temporalmente el poder.- Miles de tunecinos toman las calles al grito de "¡Fuera Ben Ali!".- Convocado el estado de emergencia en todo el territorio
El 14 de enero de 2011 será una fecha que, probablemente, dará nombre a plazas en Túnez. El presidente Zine el Abidine Ben Ali, abandonó el país ante la imposibilidad de frenar las protestas y aterrizó unas horas después en Jedda, en Arabia Saudí, tal como ha confirmado la casa real saudí en un comunicado oficial [aquí, en árabe].
El mandatario huyó ante la imposibilidad de frenar las protestas populares que exigían su dimisión. La aeronaba que le transportaba despegó a las 18.15 del aeropuerto internacional de Túnez-Cartago escoltado por la Fuerza Aérea tunecina y sin rumbo anunciado. Hacia la medianoche del sábado, hora española, la cadena Al Arabiya anunció que el avión presidencial había aterrizado en la península arábiga.
Los jeques se apresuraron en anunciar que daban la bienvenida al mandatario y a su familia, que se instalarían allí "por un periodo de tiempo indeterminado".
Arabia no fue el primer destino que se le asignó al político en un baile de países y aeropuertos; tras ser rechazado un primer intento de aterrizaje en Francia, alrededor de las diez de la noche del viernes un avión tunecino fue autorizado para tomar tierra y repostar en el aeropuerto de Cagliari, en Sicilia, y durante tres horas se especuló con la posibilidad de que Ben Ali estuviera a bordo. Finalmente la nave despegó de regreso a Túnez escoltado por cazas italianos y dejando tras de sí un halo de misterio.
Visitante incómodo
Ben Ali se ha convertido en un visitante incómodo para las democracias occidentales. En Francia, el presidente, Nicolas Sarkozy, y el primer ministro, François Fillon se reunieron ayer en el palacio del Elíseo para abordar la situación que planteaba un posible exilio en su territorio del mandatario africano. La sede de la Presidencia francesa aseguró en un primer momento no tener información sobre si el avión del presidente se dirigía hacia territorio francés, aunque una fuente policial que pidió el anonimato indicó minutos después a Reuters que la policía había sido avisada del probable aterrizaje de Ben Ali en un aeropuerto parisino. Según Le Monde, un avión en el que iba la hija de Ben Ali aterrizó a las 19.30 en el aeródromo de Le Bourget y una segunda aeronave que viajaba vacía fue "invitada a no aterrizar", mientras que una tercera que se dirigía también a la capital francesa fue desviada al no encontrar autorización para aterrizar. El Ministerio de Exteriores de Francia asegura que no había ninguna petición de acogida del presidente tunecino y que, en caso de recibirlo, consultaría antes con las autoridades interinas de Túnez. Según medios franceses, Sarkozy rechazó la llegada de Ben Ali.
No hay comentarios:
Publicar un comentario