Mayorga fue derribado, Cotto se impuso por KO técnico

Un potente gancho de izquierda a la mandíbula, que derribó al pugilista nicaragüense Ricardo Mayorga en el round 12, le puso fin a un combate anoche en Las Vegas, que confirmó como campeón mundial superwelter de la AMB, al puertorriqueño Miguel Cotto.

Las acciones llegaron a su fin cuando restaban 53 segundos al asalto final, decretando nocaut técnico del boricua, también favorecido en las tarjetas de los jueces, quienes a ese momento llevaban de manera unánime 107-103 para Cotto, verdadero dominador del pleito.

De este modo, las aspiraciones del controversial pugilista pinolero, de regresar a planos cimeros del boxeo y situarse de frente a una pelea contra Manny Pacquiao, se vieron desvanecidas, mientras se levantaban interrogantes sobre su futuro en el ring, si es que aún le queda uno.

Contrario a lo que pregonó constantemente en las conferencias previas a la pelea, Mayorga no fue capaz de embestir al consistente peleador boricua, quien se presentó al combate con mucha calma y jaló el gatillo cuando consiguió cercar al nica, quien lució lento y tieso.

SE LASTIMÓ UNA MANO

En medio del violento intercambio de metralla en el round 12, Cotto le disparó el gancho que hizo retroceder bruscamente a Mayorga, quien en ese instante acusó problemas en su mano izquierda y se pararon las acciones definitivamente.

Mayorga solicitó que se le retirara el guante de inmediato y pidió ayuda para su lesión en la mano, aunque objetivamente no fue ese el factor que desequilibró una pelea que en ningún momento tuvo en su control.

A pesar que los pronósticos insistían en la posibilidad de un nocaut, la pelea se fue hasta el último episodio, pero un recital en el que Cotto impuso las notas dominantes gracias a sus ganchos de izquierda y potentes derechas que abollaron al nica.

Mayorga terminó con el pómulo izquierdo seriamente averiado, mientras Cotto mostraba también señales claras del castigo recibido, aunque en ningún momento se vio que su dominio pasara dificultades, por el contrario, se extendió hasta el fin.