martes, 29 de marzo de 2011

El domingo fue el día más caliente del año


El domingo pasado fue el día más caliente del año en el Pacífico de Nicaragua.

Las temperaturas más elevadas estuvieron por encima de los 35 grados Celsius, algo que no debe sorprender en época seca, pero que se dio por primera vez en el año.

El Instituto Nicaragüense de Estudios Territoriales (Ineter) confirmó que el fin de semana fue el más caluroso en los primeros tres meses de 2011, especialmente en la región del Pacífico del país.

Managua registró 36.7 grados Celsius la tarde del domingo, León alcanzó los 35.7 grados, Masaya 35.5 y Chinandega 35.0 grados Celsius.

Para tener una idea, cuando el cuerpo humano alcanza una temperatura similar o superior a los 37 grados Celsius se considera que la persona sufre calentura o fiebre.

Según Salvadora Martínez, directora de Meteorología Sinóptica del Ineter, dijo que las temperaturas registradas todavía no alcanzan las normas máximas históricas.

Esto significa que las temperaturas podrían seguir aumentando.

MÁS CALOR, MÁS ENFERMOS

Las salas de emergencia de los centros de salud de la capital están siendo visitadas con más frecuencia por pacientes con problemas de presión alta, sobre todo en los últimos tres días, donde los casos se incrementaron a causa de las temperaturas que sobrepasaron los 36 grados en todo el país.

Aunque las autoridades no brindaron datos precisos, en centros como el Francisco Buitrago, al sureste de Managua, el personal de emergencia tuvo que ser reforzado porque no daba abasto.

En esas labores hasta los altos funcionarios de dicho centro colaboran para resolver el problema. Fue el caso de la subdirectora Flor López, quien los ayudó durante algunas horas pese a tener otras responsabilidades.

“El fin de semana tuvimos bastantes pacientes con problemas cardíacos e hipertensos. Se nos elevaron los casos al punto que estamos trasladando a otras unidades entre tres y cuatro personas al día”, explicó López.

La doctora también señaló que en los últimos días han atendido a personas afectadas con el síndrome del golpe de calor, que es la consecuencia más grave del exceso de temperatura. Esta situación puede provocar graves daños al organismo debido a que muchos órganos corporales dejan de funcionar correctamente a elevadas temperaturas.

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