Por más que el ciudadano Walter Porras Amador trató de negar su despido como titular de la Dirección General de Ingresos, DGI, aduciendo en dos patéticas comparecencias televisivas que se encontraba de vacaciones, La Gaceta, Diario Oficial, del lunes 11 de abril, lo hizo encontrarse una y otra vez con esa realidad. Lo habían echado de la entidad que consideraba su hacienda. “Cancélese el nombramiento de Walter Porras Amador en el cargo de Director General de Ingresos (DGI)”, dice el artículo 1 del Acuerdo 92-2001, publicado en La Gaceta No. 69. “Nómbrese al capitán en Retiro de la Policía Nacional, compañero Martín Gustavo Rivas Ruiz, licenciado en Economía, en el Cargo de Director General de Ingresos”, dice el artículo segundo del Acuerdo, y “nómbrese al compañero licenciado Humberto Antonio Solís Reyes, en el cargo de Subdirector General de Ingresos”, añade el tercer artículo de la decisión presidencial que surtió efecto desde el lunes. Porras cae del cargo dos meses después de que investigaciones de EL NUEVO DIARIO revelaran las anomalías en el manejo de los fondos, así como el nepotismo, el tráfico de influencias, y las alegres celebraciones con dinero de la DGI. Fuentes de la DGI informaron que Porras sabía de su despido desde la semana pasada, y que al hacerse efectivo el lunes, convocó a sus fieles para iniciar una huelga general en todas las rentas del país, intención que fue sofocada en horas de la noche, cuando se le llamó de la Secretaría del partido de Gobierno ordenándole no provocar más problemas.
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