Esta nueva reina nació en Miami, Florida, el 24 de octubre de 1988, sus padres son Olga Isabel Cifuentes, nicaragüense, y Gildardo Bolívar, colombiano. En el horóscopo, aunque pocos creen en él, está regida por el signo Escorpión, y su talento especial es modelar y hacer deportes. “Juego fútbol y voleibol”, afirma. Según dijo, fue criada como buena latina en Miami, “aunque muchos creen que porque vivo en Estados Unidos me he vuelto americana, pero no, en Miami hay muchos latinos, hay cultura por todos lados: tenemos colombianos, venezolanos, cubanos, nicaragüenses, puertorriqueños, etc.”. En cuanto a la cultura culinaria, esta joven nos confesó que le enseñaron –y le encanta– a comer gallopinto, arepas y nacatamales; a beber cacao y pinolillo. “Soy una mezcla de la cultura de mis padres, soy como colombo-nica”, dice. Pero aunque posee un poco de ambas nacionalidades, Bolívar decidió representar a Nicaragua en NBL porque confiesa conocer más de este país que de Colombia. “De niña siempre vine todos los veranos por mi abuela… aquí tenía clases de equitación, de belly dance, pasaba tiempo con mis tíos abuelos, primos y hermanos también”, señala. Una razón más por la que decidió representar a Nicaragua es porque asegura que uno se “pega mucho a su mamá, y la mía es nica”, además, agregó otro motivo: “También quería dedicar este concurso a mis abuelos que fallecieron, quienes eran nicaragüenses. Mi abuelo, Francisco ‘Chico’ Cifuentes, y mi abuela Elvira González Garlán”, dijo. Aventuras infantiles marca Bolívar La infancia de Nastassja estuvo muy ligada a su mamá, quien le animaba a competir en concursos de belleza, le invitaba a cantar, a hacer imitaciones y a modelar, aunque llegó a un punto en que se sintió intensamente atraída por los deportes, “yo soy muy atlética”, aseguró, “me encantan los deportes, comencé a jugar voleibol y fútbol, aunque estaba enfocada también en los estudios”. Afirma la joven --conversadora y muy risueña-- que en su niñez y en su juventud no tuvo muchos novios, se la pasaba con su mejor amiga ‘Gigi’, “a quien conozco desde kínder garden, y es como una hermana para mí”, aunque si de hermanos de sangre hablamos, Nastassja es la mayor de cuatro: Jean Carlos, Sebastián e Isabel, la menor. “Tengo que ser un buen ejemplo para ellos y para muchos niños”, afirmó consciente. En cuanto a sus estudios, cuenta la reina latina que alcanzó el segundo año en la Universidad en la carrera de Mercadeo de Moda, porque “me encanta el mundo de la moda”, pero debido a lo cara que era el Alma Mater donde se inscribió, tuvo que retirarse por cierto tiempo, hasta que pudiera costearla y culminar su meta académica. Aquí es donde Natassja se involucra en Nuestra Belleza Latina. La historia que ella nos compartió es sinónimo de empeño, de proponerse firmemente un sueño hasta conseguirlo. Un día veía televisión con su mamá, y vio la convocatoria en Univision. Ambas se dijeron: ¿Por qué no? Y ustedes mismos pueden ver los resultados, ahora la joven, de apenas 23 años, no solo obtuvo un título de belleza, sino que, lo más importante, cumplirá con varias de sus metas propuestas. Lo dicho, al terminar de contar esta breve historia, Nastassja reveló --haciendo con su mano la señal de dinero-- que “ahora que tengo un poco de billete, quiero regresar y culminar mi carrera”. Mientras, debe cumplir un año de contrato con la cadena Univision. En su agenda de vida también rola otro “sueño chiquitito que tengo por ahí”, asintió, y es que aspira a convertirse en un angelito de la marca de ropa interior Victoria Secret, y ser la primera latina que modele sobre esas pasarelas. Los temores de una reina Por otra parte, los temores son indiscutiblemente parte de nuestras vidas, y en la vida de esta beldad, en sus propias palabras, hay muy pocos. Normalmente, las personas le tememos a la muerte, pero Nastassja asegura que la acepta tal cual. “Todo el mundo muere, pero la clave está en que debemos vivir la vida”. Confesó que a la única cosa que le teme es a las serpientes. Como una mujer normal, sin corona, sin banda ni compromisos de reina, Bolívar dice ser la misma persona que “ves detrás de las lentes (fotográficas), yo no cambio”. Lo único que quizás haga la diferencia entre Nuestra Belleza Latina 2011 y Nastassja Bolívar es “que me pongo un poco mas de maquillaje”, comparó. Tampoco confesó ser una chavala “de rumbear (fiestera), a mí me gusta ir al cine, me encanta comer, yo soy flaca, pero como mucho”, insistía, y se delató de paso, amante de la pizza, “me atrae la comida italiana, aunque no cambiaría la comida latina”, expresó. Comentó que la conocen en todas las fritangas en Miami. La lucha por la corona de NBL Miles de chicas llegaron a realizar las audiciones para competir en el certamen de NBL, que se llevó a cabo en seis estados, y, alternativamente, ‘on line’ donde podían mandar sus vídeos. De miles de bellas mujeres, escogieron a 87, de las cuales seleccionaron 12 que entraron a la mansión. “De las 12, el público eligió a una… y esa soy yo”, manifestó Bolívar, con humildad y con una amplia sonrisa. Y aunque no habla muy bien español, Nastassja se sintió llena de orgullo por Nicaragua, que es, según la describe, como “un tesoro escondido”, y cuando los espectadores se enteraron de que participaba una nicaragüense, todos le acompañaron durante la competencia dándole ánimos y “echándome porras”. La nueva reina latina nos confesó que al ganar sintió bonito, “porque no gané por belleza, sino porque fui la única que no se peleó con las demás chicas en la mansión, gané por muchos votos y por mi inteligencia”. Esto lo corroboramos en la página de Univision, en donde la describen así: Natassja fue otra gran favorita durante la competencia, muy a pesar de su poco dominio del español, para lo que se esforzó como nadie leyendo en voz alta, tomando clases de dicción y practicando en la mansión. Además, Nastassja enamoró a sus compañeras, y es de las pocas chicas que no tuvieron roces con otras. Nas realizó su prueba de talento y recibió un emotivo mensaje de su bisabuela, que, como a las demás finalistas, la hizo romper en llanto, rezaba parte de la nota relacionada con nuestra belleza nica colombiana. Y aunque salió victoriosa, Nastassja fue honesta: “No tenía la corona en mente, sino mas bien quería representar a los latinos, a Nicaragua, y obtener una carrera siendo o no reina”. De todos modos y aunque la obtuvo, la bendita corona no ha cambiado a Nastassja, ella asegura que es la misma, aunque a su vida le dio giros grandes, porque “hizo realidad mis sueños”, ya que con ella sobre su cabeza, puede también llegar a muchos niños, puede inspirar, ayudar… Basada en su vida personal, Bolívar quiso compartir algo de ella antes de despedirse de la entrevista, que por su apretada agenda debía terminar. De sus labios pintados de rojo intenso, salieron palabras de empuje, de ánimo: “Siempre tengan la mente positiva, y con Dios y con su familia a su lado pueden lograr cualquier cosa que quieran”. No dejé que se fuera sin antes sacarme la espinita, pues esos detalles dicen mucho de las personas. Y ese tatuaje, ¿qué significa?, le pregunté, por la inquietud que me causó. ¿Te gusta?, me cuestionó. “Es simbología egipcia con la inicial de mi mamá, mi papá, mis hermanos y el ‘Anj’ que simboliza la vida, porque mi familia es todo para mí”, subrayó. Cuando estaba en el quinto grado, la madre de Nastassja se fue a estudiar a Egipto, y al volver lo hizo con libros relacionados con el lugar. “Me atrajo mucho este tema, y en ese momento me ilusioné con estudiar estas ciencias”, recuerda, entonces “cuando pensé en hacerme un tatuaje, quise hacerlo de algo relacionado con mi familia”, y he aquí la razón por la que esa marca se luce enigmática en su muñeca derecha. “Este es el único y el último tatuaje que me hago”, dijo entre risas, y partió a cumplir con la misión de toda una reina latina.
El futuro de Nuestra Belleza Latina
Nada está dicho, nada está escrito, y aunque esta colombo-nica tiene cantidad de planes en mente, no deja de acoger la idea de casarse algún día y de formar su propia familia, pero eso será cuando llegue el momento, “ahora estoy muy enfocada en mi carrera, aunque creo que el matrimonio es algo bello, tengo el perfecto ejemplo de mis padres, quienes tienen de estar juntos 27 años”. Y mientras ese momento llegue, la reina comenta que alguien como su papá será su hombre ideal, a quien admira mucho por su forma de ser. “Mi papá puede hacer reír a cualquier persona, es un payaso y siempre anda alegre, ¡con unas energías…! Es como que tuviera corazón de niño”, lo describe. Nastassja quiere a alguien así, pues asegura que no le importan mucho los atributos físicos de un hombre, sino su ser interior: un buen tipo que si le hace reír, ella es feliz. Como tan buena percibimos que es la relación de Nastassja con sus progenitores terrenales, nuestro deber se convirtió en indagar un poco sobre qué tan buena es su relación con Dios. ¿Crees en Él?, le cuestionamos. “Sin Dios no hubiera ganado esta corona”, afirmó sin titubeos, y con una serenidad en su voz que fue percibida como un agradecimiento más.
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