sábado, 14 de agosto de 2010

Se entrega candidato a la presidencia de Guatemala Alejandro Giammattei


GUATEMALA...
TOMADO DE PRENSA LIBRE
Nueve días después de haber permanecido refugiado en la Embajada de Honduras, Alejandro Giammattei salió ayer de esa misión diplomática y fue conducido a la Brigada Militar Mariscal Zavala, en donde quedó detenido, sindicado por la ejecución extrajudicial de 10 reosEn medio de una intensa jornada, el ex candidato presidencial manifestó que se considera preso político y se declaró en huelga de hambre.

Giammattei salió de la sede diplomática a eso de las 14 horas en el vehículo de Sergio Mendizábal, viceministro de Gobernación, y fue conducido al Juzgado Primero de Alto Riesgo, donde le hicieron saber que había una orden de captura en su contra por los delitos de ejecución extrajudicial de tres reos fugados de la cárcel El Infiernito, Escuintla, en el 2005, y de siete reclusos en la Granja Penal de Rehabilitación Pavón, en el 2006, y por asociación ilícita.

La audiencia no se llevó a cabo, porque Giammattei no contaba con abogado defensor, por lo que fue fijada una nueva sesión el próximo martes, para escucharlo en su primera declaración. Ese día le presentarán las declaraciones anticipadas de seis testigos protegidos que lo incriminan.
Posteriormente fue llevado a Mariscal Zavala, zona 17, donde quedó recluido.
Huelga de hambre
Al salir del juzgado, Giammattei dijo a los periodistas que se declaraba preso político, por considerar que no son ciertas las imputaciones en su contra, y que iniciaba una huelga de hambre hasta que se le garantice un debido proceso.
Denunció acciones de intimidación y persecución en su contra, además de que habían allanado en forma ilegal su oficina, donde supuestamente colocaron aparatos para intervenir llamadas telefónicas.

Afirmó que esas acciones las denunció en la Procuraduría de los Derechos Humanos, el 13 de junio último.

“Durante varios días fui perseguido por las autoridades, así como mi esposa”, reprochó.
“Hay un precio sobre mi cabeza, por lo que no puedo proteger a mi familia”, agregó.
Responsabilizó también al presidente Álvaro Colom y al mandatario hondureño Porfirio Lobo de lo que le pueda ocurrir a sus familiares.

Termina espera
La atención sobre Giammattei comenzó el 5 de agosto, cuando se conoció que se había refugiado en la Embajada de Honduras, zona 10, donde pidió asilo político por considerarse perseguido.
Ese mismo día fue girada una orden de captura contra el ex presidenciable, y seguidores suyos publicaron en Internet un video en el que este descalificaba las acusaciones en su contra.

Pese a sus gestiones, el gobierno hondureño le denegó la petición de asilo político, y el miércoles recién pasado le dio 48 horas de plazo para que abandonara la sede diplomática.

Ayer, Giammattei salió de la misión diplomática por voluntad propia, según el embajador de Honduras, Jorge Gabrie, quien detalló que se firmó un acta notarial que se entregará a la justicia guatemalteca.

Gabrie informó que el gobierno hondureño pidió al guatemalteco que garantice la integridad física de Giammattei y que fuera sometido al debido proceso judicial, a lo cual se comprometieron el presidente Colom y Carlos Menocal, ministro de Gobernación.

Respecto del porqué el político decidió refugiarse en la embajada hondureña, Colom dijo que pudo haber fuga de información días antes de que se emitiera la orden de captura en su contra.

“Es probable. El sistema de justicia está muy poroso y pudo haber habido fuga de información”, expresó.

Día agitado

Ayer, cuando venció el plazo de 48 horas para que Giammattei abandonara la misión, hubo gran movimiento en los alrededores. A eso de las 11 horas, unos 30 seguidores del ex presidenciable de la Gran Alianza Nacional se aglutinaron en las afueras de la embajada, para expresarle su apoyo, entre ellos el diputado independiente Edwald Scheel.

Media hora más tarde, dos miembros de las Fuerzas de Intervención Policial ingresaron en la sede. A las 12.35 horas, Giammattei recibió la visita de Paul Richard Gallagher, nuncio apostólico, y media hora después ingresó Sergio Mendizábal, viceministro de Gobernación.

A las 14 horas, Giammattei salió de la sede diplomática en el vehículo de Mendizábal, que fue resguardado por una caravana policial hasta la Torre de Tribunales. El viceministro acompañó al político hasta el Juzgado de Alto Impacto, donde le informaron sobre los cargos en su contra.


ONU observa avances

En un comunicado, la Oficina de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos expresó que valora los avances que representan para la justicia en Guatemala las recientes investigaciones del Ministerio Público y la Cicig en el caso Pavón y otros de ejecuciones extrajudiciales, tráfico de drogas, lavado de dinero y extorsiones.

Según la nota, “estas son señales alentadoras en la lucha contra la impunidad y el desmantelamiento de estructuras criminales en el país”. Esa entidad internacional alienta a que continúen las investigaciones, así como que se juzgue y sancione a quienes han cometido hechos reñidos con la Ley.

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