El paquete de reformas al Sistema Nicaragüense de Seguridad social propuesto en la página Web del INSS y enviado al FMI, sigue siendo duramente cuestionado. Al respecto, la población de nuevos contribuyentes que se verá afectada por estas reformas, no refleja gran entusiasmo por un sistema que aumentará sus responsabilidades, pero no sus beneficios. Para Sarah Alvarado Cerda, de 20 años y vendedora de la empresa Mister Ticket, “esto perjudica directamente a todos los jóvenes cotizantes”. Edna Damaris Aguilar, gerente del restaurante Tip-Top, de 29 años, considera que las reformas son descabelladas en un país tan pobre como Nicaragua. “Eso está bien para países ricos, pero no para Nicaragua, donde las personas vivimos menos. Vamos a pasar toda nuestra vida trabajando para engrosar los bolsillos de los políticos y asumir una deuda que debería pagar el Estado”, comenta. Roberto Cardoza Baltodano, mesero de Rosti Pollos y de 24 años, opina que esto “es una locura que no viene acompañada de mejoras en los servicios de atención a los asegurados, ya que pagaremos más por lo mismo”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario