El director del Instituto de Telecomunicaciones (Telcor), Orlando Castillo, trató ayer de acallar las críticas sobre las asignaciones de frecuencia de televisión a la familia gobernante o allegados a estos, alegando que anteriormente ya había otros grupos económicos en el país que tenían un monopolio de comunicación, al poseer al mismo tiempo canales televisivos y radioemisoras.
“Yo no le veo ¿por qué decirle monopolio a un grupo y al otro no decirle monopolio?”, fue la defensa que hizo Castillo, quien fue empleado de los Ortega en Canal 4, afirmó que así como las autorizaciones anteriores fueron hechas legalmente, igual lo son las actuales asignaciones.
“Ayer yo miraba en unas noticias (...) que decían que no miraban monopolio, algunos periodistas no ven monopolio porque dicen que la libre competencia más bien es sana y que hay más alternativas para los televidentes de ver más medios de comunicación y es así”, argumentó Castillo.
Es más —expresó— “si alguien solicita una frecuencia que está libre y llena todos los requisitos y el comité (que existe en Telcor) que analiza y recomienda su aprobación, no le veo por qué no aprobarlo, sea de cualquier empresa que sea”.
CASTILLO MANIPULA SUS ACTOS
Pero lo que el director de Telcor obvia es que el ente regulador ha asignado más de una frecuencia televisiva a un mismo grupo empresarial. Y uno de estos es la misma familia del Presidente.
La familia presidencial, la cual es presidida por un funcionario público, en este caso el mismo Ortega, no ha justificado con qué recursos está comprando estos bienes que están pasando a ser parte de su propiedad privada.
Además, Castillo manipula los hecho, ya que la familia Sacasa (que opera la frecuencia de Canal 2) y la familia Valle (a cargo de Canal 12) solo tienen asignadas una sola frecuencia de televisión con su respectiva repetidora.
Pero la familia presidencial tiene asignadas cuatro frecuencias (4, 8, 13 en la banda VHF).
Solo la frecuencia del canal 47 en UHF, que había sido entregada inicialmente al diputado sandinista Evertz Cárcamo antes de que se le fuese arrebata para entregársela a la familia presidencial, no está operando comercialmente.
El otro grupo beneficiado es el de un socio y viejo conocido del mismo presidente Ortega, el empresario mexicano Ángel González, quien le entregó al mandatario su primera frecuencia, la de Canal 4 de televisión.
A cambio de este favor, Telcor diligentemente le ha concedido a sociedades vinculadas con González la operación de los canales 9, 10 y 11 en la banda VHF y los canales 32, 34, 36 y 38 en la banda UHF.
En la edición de LA PRENSA de ayer, la presidenta del Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh), Vilma Núñez, dijo que el monopolio creado por la familia gobernante con los medios de comunicación, sobre todo televisivos, es una demostración de cómo estos centralizan el poder.
Castillo alegó que todas las frecuencias autorizadas para los nuevos canales televisivos las ha otorgado conforme a la ley.
¿ESTADO PERDIÓ LA FRECUENCIA DEL 6?
Uno de estos casos fue la asignación de la frecuencia del Canal 9 de televisión, asignada a la sociedad Digital Media de Nicaragua S.A., cuyo representante legal es el señor Alberto Leopoldo Mendoza D’Arcy.
Alegó que esa frecuencia ya no es del Estado, pues 30 días después que un medio de comunicación sale del aire vuelve a Telcor, aunque sea del Estado. Con esa lógica, el Canal 6 tampoco sería del Estado a estas alturas.
Alegó que el avance tecnológico les ha permitido hacer uso tanto de canales pares e impares y para esto emitió un decreto administrativo que reformó el artículo 26 del acuerdo administrativo 07-97 para que cese esta prohibición de no adjudicar los canales impares en frecuencia VHF.
No hay comentarios:
Publicar un comentario